La Organización Mundial de la Salud calcula que, para 2050, casi 2.500 millones de personas sufrirán algún grado de pérdida auditiva y al menos 700 millones necesitarán rehabilitación auditiva.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recordó en una rueda de prensa este pasado viernes 3 de marzo que una de cada 15 personas en el mundo sufre de problemas auditivos, es decir, tiene algún tipo de pérdida de audición o de infección que puede causar afecciones crónicas en el largo plazo.
Shelly Chadha, directora del programa para la prevención de la sordera de la OMS, recalcó que la situación puede llegar a ser especialmente preocupante en la infancia, ya que tres de cada cuatro niños sufren antes de su quinto cumpleaños algún tipo de infección auditiva.
Aunque contraer una infección no es necesariamente riesgoso en sí, el problema surge cuando este problema no es tratado oportunamente, explicó. Si no se cuenta con un tratamiento adecuado, se pueden producir afecciones crónicas y pérdida de audición, afirmó.
“Aunque los problemas de audición son muy comunes, los servicios para atenderlos siguen siendo limitados”, destacó Chadha. Esto, entre otras cosas, porque los profesionales de salud en atención primaria no suelen tener formación adecuada; la atención de este tipo de casos suele dejarse para la atención especializada.
Todo esto desenlaza una cadena de complicaciones para los pacientes. Por ejemplo, señaló la experta, tener que buscar atención especializada hace que, cuando una persona sufre este tipo de infecciones a menudo, deba viajar largas distancias para ver al especialista, o pagar “importantes sumas de dinero” para lograr atención sanitaria en centros especializados y hospitales. Además, se suma el problema de que hay una falta de profesionales especializados, con apenas uno por cada millón de personas en los países en desarrollo, indicó Chadha.
La OMS calcula que para 2050 casi 2.500 millones de personas sufrirán algún grado de pérdida auditiva y al menos 700 millones necesitarán rehabilitación auditiva. Advierte, también, que más de mil millones de adultos jóvenes corren el riesgo de sufrir una pérdida de audición permanente y evitable debido a prácticas auditivas “poco seguras”.
¿Qué es la pérdida auditiva?
Según la OMS, la pérdida auditiva se da cuando una persona no es capaz de oír tan bien como alguien con una audición normal, con umbrales auditivos de 20 dB o mejores en ambos oídos. Esta pérdida puede ser leve, moderada, grave o profunda, así como puede afectar a uno o a ambos oídos.
En general, genera dificultades para oír conversaciones o sonidos fuertes y, a largo plazo, puede afectar los procesos de educación, socialización y vida diaria de las personas que la padecen. “En los países en desarrollo, los niños con pérdida de audición y sordera no suelen ir a la escuela. Los adultos con pérdida de audición también tienen una tasa de desempleo mucho más alta”, destaca la OMS.
Dependiendo del grado de pérdida de audición, los tratamientos varían. Por ejemplo, algunas pueden lograr comunicarse con lenguaje hablado, mientras que otras pueden beneficiarse del uso de audífonos, implantes cocleares y otros dispositivos de ayuda, así como de subtítulos.
FUENTE: elespectador